Qué es el tickling, la práctica sexual que triunfa entre los jóvenes
¿Sabes lo que es el tickling?
El tickling es una práctica sexual que consiste en la fusión de risa y sexo.
Se trata de un juego preliminar donde hacemos cosquillas en ciertas partes del cuerpo, como la planta de los pies o los pezones, para, junto a la excitación, provocar el orgasmo.
¿Qué?
Sí, nosotros cuando lo escuchamos nos quedamos estupefactos. “¿Hacer cosquillas durante el sexo? ¡Pero bueno!”, pensamos.
Sin embargo, tiene su sentido. Y, tras indagar un poco, te lo queremos explicar en el blog de BIENERGY.
Descubre con nosotros en qué consiste el tickling y por qué es una práctica sexual muy divertida.
Qué es el tickling y por qué triunfa entre los jóvenes
Como hemos dicho arriba, el tickling forma parte de la previa, los preliminares de la penetración. ¡Aunque también es una práctica sexual en sí misma, como el petting!
Por eso mismo, no tengas miedo a usarla cuando no vayáis a más en la cama. Simplemente… ¡pasadlo bien!
Detrás del tickling encontramos lo que siempre está detrás del sexo: la biología.
En este caso, debemos considerar que durante ambos procesos, la risa y el sexo, nuestro cerebro libera endorfinas.
Estas son consideradas las “hormonas de la felicidad”. ¿Hasta ahí bien? Perfecto. Algún iluminado decidió combinar ambas actividades, reír y practicar sexo. ¡Genio!
La liberación de esta hormona provoca un efecto secundario más que interesante. Igual que cuando vamos a hacer una maratón preparamos nuestro cuerpo calentando, con el tickling buscamos que nuestro cerebro se ponga en modo placer.
Consecuencia: tras practicar esta práctica sexual, el organismo está más dispuesto a practicar sexo y tendrá orgasmos más intensos (¡bieeeen!).
Cómo practicar Tickling
La liberación de enforfinas nos prepara para el sexo, mentalmente hablando.
Por eso mismo, esta práctica es ideal como juego preliminar y paso previo a otras actividades como el sexo oral o la penetración.
Esta actividad no tiene una zona en concreto en la que centrarse. Normalmente, se trata de algo que se puede hacer en cualquier parte del cuerpo (las manos, la espalda, la nuca…)
Es una experiencia divertida, ya que nos servirá para autodescubrirnos más aún, e identificar zonas erógenas de nuestro cuerpo.
Trucos para hacer Tickling
¿Estás interesado pero no sabes cómo inciarte en el Tickling? Venga, que te ayudamos.
Aquí van una serie de trucos que te ayudarán para practicar este juego preliminar tan divertido:
- Suavidad, siempre suavidad. Evita las cosquillas “molestas” de presionar los riñones de tu pareja. Usa la yema de los dedos, una pluma… ¡lo que se te ocurra! Pero siempre, siempre con la máxima suavidad posible.
- Complementos hot para el Tickling. Además del plumero, podéis serviros de algunas cosas propias del BDSM como esposas, vendas, etc. Quién sabe, quizás os empiece a gustar ese rollo.
- Busca “nuevas tierras”. No te centres siempre en el mismo sitio para hacer cosquillas. Viaja por todo el cuerpo de tu pareja, si encuentras una zona erógena, déjala con las ganas de más.
- Usa diferentes partes de tu cuerpo. ¿El plumero y los dedos te aburren? Prueba a usar la lengua, la nariz… ¡todo es cuestión de experimentar!
Hasta aquí nuestro artículo sobre qué es el Tickling. Sin duda, se trata de una práctica muy interesante y que puede generar orgasmos intensos y placenteros.
¡Pruébalo y nos cuentas!